Ubud
(21- 25 Agosto)
Cogimos el bote de Nusa Lembogan a Ubud. Jess y yo teníamos el viaje ya direto a Ubud y Steff se iba a Canggu. Recuerdo que ella no lo tenía organizado y nos daba un poco de “cosa” dejarla sola pero en cuanto llego al puerto, y como sucede en todos los puertos que conozco de Indonesia, Thailandia y seguramente muchas localidades asiáticas, un montón de conductores y agencias de viaje se te aproximan a ver en que te pueden “ayudar”.
Jess y yo como digo estábamos organizadas desde Lembogan y llevábamos el “colgante” que te ponen, como si fuera un sello con el destino en un paquete de correos, “destino:ubud” así que al llegar un señor que no habíamos visto en la vida al ver nuestros “colgantes” nos cogio y nos llevo al coche que nos conduciría a Ubud. Todo esto le quita un poco de aventura y excitación al viaje pero a la contra, lo hace extremadamente conveniente la verdad.
Y como digo Steff tampoco tuvo mucho problema, en seguida conecto con un conductor, si tienes dinero, no es problema en Indonesia.
Llegamos a Ubud y el conductor nos dejo como en una estación de autobuses, donde teóricamente estaba pactado la entrega del paquete.
De ahí caminamos al hotel, ya que según Google maps estaba cerca pero la verdad que con la maletas y las aceras tan estrechas que tiene Ubud no fue muy fácil. El hotel además estaba en una bocacalle y era también un centro para masajes que estaba en otra bocacalle dentro de la primera así que casi me lo salto. Jess no, que lo vio enseguida y entro a preguntar.
Las habitaciones muy bien también aquí pero no tan bien como estábamos acostumbradas en las islas. Muy oscuras y algo más “cutres” pero bien en general como digo.
El de recepción, o el que salió a recibirnos, excesivamente pelotero para mi gusto pero bueno, tienen este estilo así aquí
Ubud, por lo que vi al salir del taxi, y bueno la primera impresión que me dio en los días que camine por ahí, excesivamente turístico de nuevo. No sé porque me lo habían vendido como algo más “autentico” en Indonesia, pero eso debía ser 100 años atrás porque ahora de autentico tenía mas bien poco. Las dos calles principales, o las que yo mejor conocí por proximidad al hotel, están llenas de cafeterías, tiendas de lujo y moda étnica pero lujosa solo al alcance de determinados extranjeros, digamos mas bien USA y Australia porque era todo como mucho más caro que en España incluso. Eso si, no había problemas para comer y elegir lo que quisieras.
En el hotel nos encontrábamos con Aida. Otra chicas de Fuerte que también estaba viajando por Bali. Éramos varios ya, no solo el grupo que habíamos decidido ir juntos al viaje, sino también Aida, mi excompi Viny y algún otro que nos encontramos de casualidad después.
Aida llego un poco mas tarde al hotel, como una hora después que nosotras, no mucho más. Me hizo mucha ilusión verla porque hacía mucho que no la veía, creo que un año. Aida tiene un aura especial, no solo físicamente sino por su forma de ser, muy madura para su edad, inteligente y muy atractiva. Sin ser visiblemente atractiva como es Jess que llama la atención, Aida es una belleza algo más encubierta, de estas que empiezas a apreciar cuando la conoces por algo más de tiempo y por eso mismo quizá incluso te atrae mas (al menos a mi pasa).
Aida se alegro mucho de verme también. Estuvimos conversando un rato, nos intercambiamos consejos para el pelo (es mi guru de pelo aunque en esta ocasión le tuve que dejar yo una mascarilla).
Fuimos a cenar después a un sitio cerca del hotel donde habíamos quedado con Vinny. Llevaba una semana en las islas deseando verlo. Me había hecho todas las expectativas del mundo después de la historia del sueño la verdad y aunque intentaba todo el rato parar mi imaginación me había sido imposible. Estaba convencida que su sueño era una segunda oportunidad para los dos y que esta vez si que íbamos a estar juntos. Que no estaba maldita y que realmente podría estar con alguien que de verdad me gustaba como en su momento fue con Manish (coincidencia que eran los dos indios).
Por eso, no puedo recordar mas que el chafon que fue verlo con la japonesa con la que vino. Todas mis esperanzas se hundieron por la taza del retrete, de hecho esa seria la imagen que tengo. Que malas son las expectativas y que rollos se había montado mi cabeza, una historia paralela.
Total que me puse al otro lado de la mesa para que los dos se pudieran sentar en el sitio que había reservado para Vinny y para mi. Me senté al lado de Aida pero inmediatamente me movi al lado de Jess al ver que ella obviamente había quedado ya con unos amigos suyos que había conocido en Canggu y que venían a cenar con nosotros.
Cual sería la sorpresa cuando los dos amigos llegaron y sus nombres eran Carlos y no recuerdo que otro nombre español..asi que en seguida empezamos a hablar y menos mal porque se me hizo olvidarme un poco el disgusto previo. De hecho y aunque eran muy jovencitos, sobre todo el catalán me encanto. Había hecho el vipassana y estuvimos hablando un montón sobre la experiencia que nos había marcado a los dos un montón.
Después de cenar y casi sin hablar con Vinny (después de todas las ganas que supuestamente los dos teníamos) porque había venido con amiga y estaba sentado al otro lado de la mesa, nos fuimos a casa.
Al día siguiente conocí a quien sería nuestro conductor en una de las calles de Ubud, una cercana al hotel. Iba yo buscando conductor y negociando con todos y este me cayo bien porque me dijo algo, no se si algo con respecto a mi actitud que fue un poco ruda al principio y me hizo caerme un poco de mi papel de negociadora dura que tengo en estos casos y volver a la realidad, este es un pobre hombre que te esta diciendo la verdad. Ah! Y porque el precio que me dijo era muy razonable en comparación a lo que me decía el gojeck y el gocar (dos aplicaciones imprescindibles en Bali) y lo que me habían dicho los demás.
Así que quede con el que si que íbamos a hacer un viaje hoy y ahí fuimos. Primero a un rio extrañísimo que Aida había visto por internet que se llamaba lembah Bidadari. El conductor nos dejo en un sitio “extraño” y nosotras bajamos un camino. Recuerdo que no se porque, porque al principio íbamos solo a los arrozales o algo así, yo iba con mi vestido rosa de playa y eso termino siendo algo así como un trekking donde descendíamos una especie de montaña. Yo estaba con mis sandalias y vamos, nada preparada para la ocasión.
Llegamos abajo y había un río sucio y una piscina empantanada también con pinta de sucia. Nos quedamos un poco pensando que hacíamos allá, sacamos un par de fotos (estas) y nos subimos arriba
Luego nos fuimos a los arrozales de Ubud, Tegallalang, una atracción turística de la zona. No me gustaron nada la verdad. Estaban todos montados para el turismo, con unos columpios enormes y desde luego sin ningún parecido a la realidad de un arrozal. Después conocería los arrozales de Sideman y no tienen nada que ver.
Después estuvimos cenando en un sitio y nos echamos unas risas con unos rollitos chinos deliciiosos, todavía me acuerdo.
Al día siguiente cogimos al mismo driver y yo tenía planeado un recorrido muy ambicioso. Primero quería ver el templo Ulun Danu y luego ir a las cataratas de Secumpul y Banyumala
Nos dijo ya el conductor que era mucho pero yo no lo creía así. Fuimos con toda la calma por la mañana a desayunar y luego al templo. De camino paramos en una tienda local y yo me compre un chubasquero y una cinta de pelo. El chubasquero me salvo de mas de una posteriormente de hecho.
El templo de Ulun Danu bueno, no estaba mal. No lo recomedaría, de nuevo me pareció un sitio super turístico como casi todo lo que había visto hasta la fecha en Bali pero luego a la salida pasamos por una ceremonia que me pareció muy interesante, por su ritual y sus sonidos con tambores así como el número de personas congregadas por la misma.
A la salida comimos en un sitio local, el más local hasta la fecha en Ubud y salimos para las cataratas. Ahí si que estábamos discutiendo cual hacer porque ya vimos que a las 15 no nos daba tiempo a las dos, sobre todo leyendo por internet que para Secumpul había un trekking de bastante tiempo.
Al final, por eso y por cercanía elegimos Banyumala, además el conductor nos dijo que había otras muy cerca también que nos podrían gustar.
Fuimos a Banyumala que, de nuevo parecían piscinas públicas mas que cataratas. Jess seguía sin poder bañarse pero Aida se metió de lleno. A mi, a pesar que la catarata era bonita, me dio pereza porque hacia fresquito y solo me meti para la foto de portada.
Había además varias parejas haciéndose fotos escénicas y eso era de todo menos privado.
Las segundas cataratas, Banyu wana, me gustaron mucho mas. Primero porque había mucha menos gente y después porque eran mas escénicas. Mas grandes, mas numerosas (estaba la catarata principal y al lado varias más pequeñas) y de hecho eran dos. En la primera solo nos tomamos la foto de detrás de la catarata pero en la segunda al final y aunque no me había metido en la de Aida, me atreví a ponerme el bañador y meterme algo mas al fondo.
Este sitio si me pareció muy bonito y con mucho encanto.
Subimos las cataratas al final con motos, que se nos ofrecieron ellas de forma gratuita al ver que subíamos andando y éramos las últimas turistas del lugar.
A la noche quedamos con Steff y con Vinny. Steff había venido a hacer el monte Batur y Vinny vino con nosotras a cenar sin amiga esta vez
Hablamos algo más y me pregunto por mi viaje a Mexico, aunque cuanodo le respondía tenía la costumbre de mirar al móvil y escribir a otra persona..hay cosas que no cambian.
Tuvimos una cena agradable y un video dedicado a milagritos. Nos fuimos pronto que al día siguiente nos levantábamos a hacer el monte Batur y no teníamos mucho tiempo de descanso
A la mañana siguiente hicimos el monte Batur. Ha sido la subida a montaña mas decepcionante que he tenido en los últimos años la verdad
Nos levantamos a las 2 am pero estuvimos como media hora esperando a que llegara el coche a recogernos. Luego paramos a desayunar en una taberna a mitad de camino donde nos dieron café balines muy cargado y unos plátanos fritos
Paramos en un parking y después de darnos unas luces (la de Steff no funcionaba) comenzamos a subir
La subida primero de todo se hacía o la hicimos nosotros, nuestro grupo, por una carretera, con lo cual le quita todo el sentido a una subida a una montaña porque, para que subes andando si hay una carretera? Bueno al menos eso es lo que yo estaba pensando y en las horas de sueño extra que hubiera podido tener de subir en coche.
Luego en un tramo ya elevado, cuando empieza la ruta mas de montaña, todavía siguen subiendo motos, no un para sino muchas motos que van haciendo que de cuando en cuando te tengas que apartar del camino para dejarlas pasar. Eso y el ruido que montan que le quita todo el encanto a la subida.
Luego estuvimos mucho rato esperando a una pareja india pues ella tenía dificultades para subir. No me hubiera importado pero luego a mitad de camino nos empezaron a meter un montón de prisa porque no llegábamos al sunrise, no se..no hay otra forma de hacerlo? Por grupos de rápidos y mas lentos y no azuzar al final..
Esto y el número de personas que éramos. Muchísimas. Creo que la montaña que he subido con más gente.
Bueno, no se como yo me perdi de mi grupo y acabe subiendo la montaña sola que tampoco era nada difícil pues solo tenías que seguir a las hordas de gente.
Al llegar arriba volví a encontrarme con estas y nos dieron un desayuno. Las vistas, si intentas ignorar a las hordas de gente, eran bonitas la verdad y ahí aproveche para hacerme varias fotos haciendo el payaso
A la tarde descansamos y cenamos en un chino con Viny y su amiga. Tuvimos una interesante discusión sobre nuestros estudios y volví a sacar la historia de porque no había estudiado historia y como todo hubiera sido igual. Viny seguía cojo (no lo he dicho antes pero se había jodido el pie con una caída con la moto ) y sugirió si podíamos cambiar las fechas del viaje a Iljen y Bromo que habíamos planeado pero para Jess y para mi, siendo nuestras vacaciones un cambio era difícil
Intenté convencer una vez mas a Aida pero no funciono y termino haciendo un plan B alternativo en Ubud. Casi me alegro ahora porque no sé, ya sabiendo como fueron las ascensiones, no lo hubiera disfrutado en absoluto
 
Comentarios
Publicar un comentario